La producción mundial de harina de pescado entre enero y junio aumentó un 40% en comparación con el mismo periodo del año anterior, mientras que la producción de aceite de pescado creció un 10%, impulsada principalmente por la exitosa primera temporada de pesca de anchoveta en Perú, que cuenta con la mayor pesquería del mundo, según la Organización Internacional de Ingredientes Marinos (IFFO, por sus siglas en inglés).
Actualmente, el IMARPE está llevando a cabo una investigación para evaluar el estado de la biomasa de anchoveta, la cual se mantiene estable en 9.5 millones de toneladas anuales. Esta evaluación será clave para establecer la cuota de pesca en la segunda temporada. En contraste con Perú, la IFFO señala que en otros países el suministro de pescado para la producción de harina y aceite ha disminuido en 2024.
Por ejemplo, en Chile, los desembarques en el primer trimestre de 2024 disminuyeron en la región sur, pero aumentaron en la zona norte. Asimismo, en Europa, Estados Unidos y China, los volúmenes de pesca también se han reducido.
Los datos de la IFFO provienen de estadísticas compartidas por sus miembros, que representan el 55% de la producción mundial de ingredientes marinos.
Aporte al PBI
Según el Marco Macroeconómico Multianual (MMM) publicado por el MEF, se proyecta que el sector pesquero peruano crecerá un 25% en 2024, su mayor incremento desde 2018, gracias a una mayor captura de anchoveta, en un contexto de disipación del fenómeno de El Niño Costero durante el segundo trimestre del año.
Para 2025, se espera un crecimiento del 7% en el sector, impulsado por el dinamismo en el desembarque de anchoveta bajo condiciones oceanográficas favorables y un efecto estadístico positivo en especies destinadas al consumo humano directo, como langostinos, pota y jurel, así como en la producción de trucha.
De igual manera, la pesca impactará en el sector manufacturero primario, con un crecimiento proyectado del 7.8% en 2024 y del 5.0% en 2025, gracias a un mayor volumen de procesamiento de pescado, beneficiado por la normalización de la captura de anchoveta en la zona norte-centro y condiciones climáticas favorables para los recursos hidrobiológicos.